Función del calcio en la producción de tomate

El calcio es un componente clave de las células manteniendo la estructura de las paredes celulares y estabilizando sus membranas.

También tiene una influencia directa sobre el equilibrio de sales dentro de las células y activa el potasio que ajusta apertura y cierre de los estomas para la transpiración de la planta. 

El calcio fomenta la germinación del polen, ajusta algunos sistemas de enzimas e influye en crecimiento y salud de células y tejidos conductivos. Tiene una influencia clave en el fruto del tomate, sobre todo en la podredumbre apical.

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Efecto de calcio por fases de desarrollo

Fase de desarrollo Efecto del calcio
Establecimiento Impulsar el crecimiento de raices y hojas
Crecimiento vegetativo Mantener el crecimiento vigoroso de la planta
Floración - Cuajado Maximizar el desarrollo reproductivo del cultivo
Maduración del fruto Mantener firmeza y calidad del fruto y reducir el riesgo de podredumbre apical

Directrices generales para aplicaciones de calcio

El calcio se requiere en cantidades relativamente grandes. Aproximadamente se absorben 170 kg/ha en un campo que produzca 100 t/ha. Como el calcio se necesita durante toda la temporada de desarrollo y el transporte hacia el fruto es lento, es una práctica común aplicar durante toda la temporada para acumular buenos niveles en los tejidos y de nuevo durante la maduración del fruto para lograr el máximo de calidad y buenos resultados en el almacenamiento.

Deficiencias de calcio

El síntoma de carencia de calcio más obvio es la podredumbre apical. No obstante, también pueden manifestarse quemaduras y mortandad en los varios puntos, tanto en raíces como brotes. En plantas jóvenes, las hojas de las plántulas se ven deformadas y con áreas necróticas amarillas o pardas, empezando en el margen de la hoja y extendiéndose hacia las áreas entre las venas. El meristemo muere pronto. En plantas maduras, los bordes de las hojas jóvenes se vuelven pardos, y algunas zonas entre las venas se ponen amarillas. El meristemo muere y las flores no se desarrollan.

En el campo, es más frecuente la podredumbre apical en suelos ácidos y donde haya un alto contenido de sales, y puede también causar una descomposición vascular en la base de la planta provocando la marchitez total. Es común bajo condiciones de baja humedad en el suelo. Los cultivos en suelos calcáreos también necesitarán aportes de calcio, ya que el elemento no necesariamente está disponible por tener una solubilidad muy baja. Donde se suministra calcio en exceso, se podrán observar deficiencias de magnesio y potasio como resultado de un desequilibrio de nutrientes. 

Ver más sobre deficiencias de calcio y otros nutrientes en nutrición para el cultivo de tomates.