La precocidad de las brassicas

Es importante construir y mantener una masa foliar en las fases más tempranas y durante un largo periodo para maximizar la producción. Una pérdida precoz de hojas no puede ser compensada durante el desarrollo y la madurez del cultivo.

Nutrición vegetal y la precocidad de las brassicas

Nitrógeno

Las variedades de brassicas de rápido desarrollo (coliflór y brócoli, por ejemplo), requieren un suministro abundante de Nitrógeno porque lo absorben y necesitan en grandes cantidades, sobre todo durante las primeras fases de desarrollo.
Las variedades de más lento crecimiento (por ejemplo los repollos), sobre todo los que se desarrollan a temperaturas más bajas y con menos luz, tardan más en utilizar el Nitrógeno necesario para un rendimiento óptimo.

Asegurando un buen suministro a las hojas exteriores les hará desarrollarse rápido para luego dar apoyo a la siguiente fase de crecimiento, proveer productos de la fotosíntesis y redistribuir el Nitrógeno para una producción alta. No lograr un nivel de Nitrógeno lo suficientemente alto en estas hojas aplicando bastante fertilizante podrá tener un resultado negativo en la producción final. Las aplicaciones posteriores no podrán compensar esta carencia.

Potasio

El Potasio juega un papel crucial en el status de energía de las plantas. Las necesidades de Potasio en las brassicas son sumamente altas, desde 2.7 hasta 5.1 kg de K por tonelada de rendimiento. La absorción continúa durante el crecimiento, así que es esencial que el suministro de Potasio sea constante conforme a las necesidades del cultivo.

Las cantidades de Potasio de 225 kg/ha y más, dan respuesta en lugares de alta producción, aumentando así tanto la biomasa de las plantas y el peso resultante de cabezas de col y rendimiento.